El ambicioso proyecto que busca erradicar la pobreza en Buenaventura
Compartimos el informe especial de la Revista Dinero, acerca del proyecto CAEB. Ver artículo original
A pesar de tener un importante dinamismo portuario a favor de la economía en Colombia, Buenaventura y su población están relegados en materia de desarrollo económico y social. Un nuevo plan pretende renovar esta región del Pacífico.
Buenaventura, la principal zona portuaria sobre el Pacífico colombiano, movió el año anterior más de 15 millones de toneladas de carga. Pese al gran dinamismo económico del puerto, las cifras muestran el estancamiento del desarrollo económico y social de sus habitantes.
El 64% de su población se considera pobre, el 9,1% está en la miseria y el desempleo afecta al 62%. Según el Departamento Nacional de Planeación (DNP), la ciudad apenas tiene una cobertura de acueducto del 76% y de 60% en alcantarillado, la cobertura en educación media es del 22% y la tasa de mortalidad infantil es de 27,6 por cada mil nacimientos.
La intervención para lograr salir del actual estancamiento que vive la región es urgente, teniendo en cuenta que en los próximos 35 años se proyecta que la población de la región será aproximadamente el doble de la actual, (pasando de cerca de 370.000 habitantes a más de 680.000 en el 2050).
Para el director del DNP, Simón Gaviria, Buenaventura debe posicionarse como la puerta de entrada de Colombia hacia el Pacífico. Cabe destacar que la aduana de la ciudad portuaria es la de mayor recaudo en el país con aproximadamente $5,47 billones al año por procesos de comercio exterior.
El plan y el proyecto que buscan renovar la región
Con el lanzamiento del programa “Nuevas Ciudades”, se busca la transformación y la creación de nuevos entornos que faciliten la inversión y el desarrollo de las regiones colombianas.
En el caso específico de Buenaventura, con los planes en inversión, planeación y desarrollo social que se están concibiendo en cabeza del DNP, “este se convertirá en un polo de desarrollo en 20 años con una reducción sustancial en brechas sociales, mejoramiento de la movilidad y seguridad para sus habitantes e inversionistas”.
El programa se construyó basado en dos ejes:
Económico: aprovechar el potencial productivo y portuario a través de la promoción y desarrollo de una gran zona de actividades económicas; juntando servicios logísticos, generando valor agregado y reduciendo costos y tiempos.
Social: promoviendo el desarrollo integral de los habitantes de Buenaventura a través de la consolidación de la infraestructura y la capacitación a la población de la región.
A nivel específico, el Proyecto Complejo de Actividades Económicas de Buenaventura (CAEB), incorporará 16.269 hectáreas en la zona de expansión, que, a través de la actualización de su Plan de Ordenamiento Territorial (POT) “determinará los usos del 100% del suelo, ya que el POT actual del Distrito sólo incorpora el 3% de la superficie del territorio”, señala el DNP.
El CAEB incluye acciones como la contratación del estudio de estructuración integral de la nueva ciudad por $5.000 millones y la financiación de infraestructura para agua potable, saneamiento básico y vías para mejorar la movilidad.
A grandes rasgos, el programa en Buenaventura pretende generar 60.000 empleos en los próximos 20 años y atraer más de 150 empresas de sectores económicos estratégicos.
César Peñaloza, director de Infraestructura del DNP, habló con Dinero acerca de este proyecto y afirmó que la iniciativa se da por el potencial logístico que se está evidenciando en el puerto. La mayor capacidad de movilización portuaria permitiría mejores servicios especializados y de valor agregado que se podrían llevar a cabo para apoyar la actividad logística en unas 1800 hectáreas.
De este terreno, “tenemos que tener concordancia con el uso del suelo y titulación de los predios, ya que gran parte de estos pertenecen a consejos comunitarios de comunidades negras (…) ellos serían socios de los proyectos y esto se está abordando con el POT y catastro multipropósito”, aseguró Peñaloza.
La etapa inicial del proyecto está estimada en alrededor de US$300 millones. No obstante, Peñaloza indica que además del actual programa, las zonas disponibles en el área urbana de Buenaventura requieren de proyectos que deben abordarse en etapas y atraer inversión nacional y extranjera.
El principal desafío en esta ocasión, es buscar los elementos que vuelvan Buenaventura un sitio que sea atractivo para la inversión pública y privada. “Empezamos por Buenaventura y estamos planteando replicarlo en zonas como Tumaco, Urabá y la Altillanura”, puntualizó.